Cada vez más dispositivos inteligentes forman parte de los sistemas de seguridad activa y pasiva de coches. Así es cómo funcionan.

Los conductores más veteranos seguramente recordarán cómo hace años ni siquiera el cinturón de seguridad era obligatorio, siempre que circulásemos por una zona urbana. Poco a poco elementos como la tercera luz de freno o los «airbags» se han ido incorporando a la larga lista de sistemas de seguridad y asistencia al conductor. Todos ellos tienen como objetivo principal ayudar al conductor para reducir el impacto de una colisión o incluso evitar un accidente. Normalmente se dan a conocer mediante una serie de siglas que, a la mayoría de los conductores, les cuesta interpretar.

Los sistemas de confort de asistencia al conductor apoyan al conductor durante la conducción. Es el propio conductor quien se encarga de activar muchos de estos sistemas.

Estas son algunos de ellos:

 Sistema antibloqueo de frenos (ABS): Supuso todo un hito en materia de seguridad vial cuando se introdujo en los turismos en el año 1978. El ABS evita que las ruedas se bloqueen y patinen ante una frenada fuerte y, por tanto, que se pierda adherencia y estabilidad. Su gran efectividad para evitar accidentes originó que todos los fabricantes acordaran voluntariamente a partir de 2004 montarlo de serie en sus vehículos destinados al mercado europeo.

Control de tracción (TCS, ASR): Previene la pérdida de adherencia de las ruedas y que éstas patinen cuando el conductor se excede en la aceleración del vehículo o el firme está muy deslizante. Funciona con los mismos sensores que utiliza el ABS. El control de tracción fue creado por Bosh en 1986.

Control de estabilidad (ESP, VDC, DSC, ESC, VSC): Detecta si hay riesgo de derrape, interviene frenando individualmente las ruedas y reduce la potencia del motor para restaurar la estabilidad del vehículo. Fue creado por Bosch en 1995 y debe ir equipado en todos los turismos que se fabriquen desde noviembre de 2011. El ESP incluye las funciones de ABS y TCS.

Reparto Electrónico de la Frenada (EBV, EBD): A diferencia del ABS, este sistema reparte de forma electrónica la fuerza de frenado entre ejes, y no individualmente a cada rueda. Determina cuánta fuerza hay que aplicar a cada rueda para detener el vehículo en una distancia mínima y sin que se descontrole. Ayuda a que el freno de una rueda no se sobrecargue y que el de la otra quede infrautilizado.

Sistema de Control de Velocidad de Crucero Adaptativo (ACC): Al igual que ocurre con el Control de Velocidad de Crucero, regula la velocidad a la que queremos circular de forma automática. La novedad del ACC es que, con la ayuda de un sistema de radar controla, también de forma automática, la distancia de circulación con respecto al vehículo precedente, frenando nuestro vehículo si es necesario para mantener dicha distancia de seguridad. El ACC no detiene el vehículo completamente y ya existen versiones que funcionan en todas las velocidades hasta 0 km/h. Se introdujo en 1998.

Sistema de dirección eléctrica asistida (EPS): A través de sensores el sistema es capaz de registrar el movimiento que el conductor realiza sobre el volante, la velocidad de marcha del propio automóvil y el régimen del motor de combustión. Y en función de estos parámetros una unidad de control eléctrica calcula instantáneamente el par de asistencia necesario en cada momento. Este sistema incrementa el control de la dirección cuando circulamos a altas velocidades y facilita las maniobras de aparcamiento a baja velocidad.

Sistema pre-colisión (PCS): Este sistema reduce los daños y lesiones en una colisión. Reconoce situaciones de accidente inminente y prepara tanto el coche como a los pasajeros para minimizar los daños, por ejemplo activa los pretensores de los cinturones de seguridad o ajusta las posiciones de los asientos. Ahora también se ofrece una versión más avanzada que alerta al conductor de peligro de colisión mediante una señal sonora y un aviso en la pantalla de información, si el conductor no reacciona pone en marcha el asistente de frenada de emergencia y aplica los frenos automáticamente para reducir la velocidad de impacto.

Detector de ángulo muerto (BLIS, BSM): Utiliza dispositivos de radar montados en las esquinas del parachoques posterior para detectar vehículos que están adelantando por los carriles adyacentes. Existen sistemas que alertan de forma continua de la existencia de vehículos en el ángulo muerto independientemente de las intenciones del conductor mientras que los más efectivos actúan únicamente cuando el conductor activa el intermitente para realizar un cambio de carril. El primer vehículo en incluir el BLIS fue el Volvo XC90 en 2005.

Aviso de salida de carril (LDW): Mediante sensores infrarrojos situados en la parte inferior del paragolpes delantero o a través de cámaras dinámicas instaladas detrás del parabrisas, junto al espejo retrovisor, el LDW registra y detecta continuamente las marcas viales del carril de circulación. En el caso de un cambio imprevisto de carril, por la ausencia de señalización del intermitente, el sistema alerta al conductor mediante una señal sonora, un testigo luminoso en el cuadro de instrumentos o con una vibración en el asiento del conductor o en el volante. Las últimas generaciones del LDW incluso realizan pequeñas intervenciones automáticas sobre el volante de dirección, indicando con ello al conductor la dirección en la que debe girar.

Asistencia de mantenimiento de carril (LKA): Es un sistema inteligente que ayuda al conductor a guiar su coche y garantizar que no se salga del carril de manera involuntaria. Sujeto a las condiciones atmosféricas y al estado de la carretera, la LKA supervisa las líneas blancas de la calzada a través de una cámara estéreo. Este sistema incluye la función de Aviso de salida del carril (LDW).

Detector de peatones con frenada de emergencia: Esta tecnología es capaz de detectar la presencia de un peatón delante del vehículo y si el conductor no responde a tiempo el vehículo avisa y activa automáticamente los frenos. A través de un radar en la parrilla del coche, una cámara al lado del espejo retrovisor interior y una unidad de control central el sistema detecta cualquier peatón situado delante del coche al tiempo que calcula la distancia entre ambos. También es capaz de detectar peatones que están a punto de alcanzar la calzada. El sistema de detección de peatones con frenado automático puede evitar una colisión con un peatón a velocidades de hasta 35 km/h. A más velocidad la prioridad es reducir la velocidad del coche antes del impacto. Para suavizar las consecuencias del impacto Volvo es el primer fabricante del mundo en incorporar un airbag para peatones.

Head-Up Display (HUD): Es un dispositivo electrónico que proyecta en el parabrisas del vehículo, a la altura de los ojos, la información más importante del cuadro de instrumentos. Su principal objetivo es evitar que el usuario tenga que desviar la vista de la carretera. Este sistema procede del mundo de la aviación.

Faros de Xenon/Bi-Xenon/Led: Los faros de Xenon es un sistema de iluminación capaz de suministrar el doble de luz que un faro tradicional con sólo dos tercios de la potencia useful site. Además, evita el cansancio del conductor y facilita una conducción más relajada incluso en trayectos largos. Los faros Bi-Xenón, además, consigue que la luz de cruce y de carretera tengan un color idéntico, adaptándose de manera óptima a la luz diurna y sin deslumbrar a los vehículos que se aproximan en dirección contraria. Pero hoy en día uno de los avances más significativos en iluminación es la tecnología Led. Consiste en diodos emisores de luz con un consumo energético muy bajo, una larga vida útil y una rápida velocidad de respuesta.

Sistema inteligente de información al conductor (IDIS): Este sistema registra continuamente la actividad del conductor y es capaz de retrasar la entrada de mensajes de texto y llamadas cuando las circunstancias de conducción no son adecuadas y puede haber riesgo de accidente. De esta manera se reduce la distracción del conductor.

Asistente de visión nocturna: Muestra la carretera con la misma intensidad que si estuvieran las luces de carretera conectadas pero sin deslumbrar a los demás conductores. Dos faros infrarrojos de corto alcance situados al lado de la parrilla del radiador emiten una luz invisible al ojo humano pero con un alcance similar al de los faros de bixenon. En el interior del coche una cámara sensible a los rayos infrarrojos situada en el parabrisas consigue captar la imagen de la carretera y proyectarla en la pantalla multifunción del vehículo mostrando posibles animales, personas, piedras, un coche averiado u otros obstáculos ‘calientes’ o ‘fríos’. Su gran ventaja es que permite al conductor reaccionar más rápidamente ante un imprevisto.

Sistema de reconocimiento de señales de tráfico: Detecta límites variables de velocidad, prohibiciones de adelantamientos y finalización de las mismas. En el futuro será posible detectar otras señales de tráfico. Gracias a este sistema el conductor está continuamente informado de los límites de velocidad de la carretera por la que circula.

Limpiaparabrisas automático: Es uno de los sistemas más frecuentes y conocidos. Mediante un sensor en el parabrisas es capaz de detectar presencia de agua activando de forma automática los parabrisas y ajustando su frecuencia según la intensidad de la lluvia.

Detector de fatiga en el conductor: Este sistema es capaz de reconocer si el conductor está a punto de dormirse al volante, a través de sensores, y de advertirle antes de que ocurra un accidente. El sistema realiza un seguimiento de varios aspectos de la cara, incluido el grado de apertura de los ojos. Además analiza los patrones de conducción y las reacciones del conductor y los combinan con datos sobre la velocidad de circulación, la hora y el comportamiento del intermitente. Si detecta que hay cansancio en el conductor le avisa mediante el símbolo de una taza de café en el salpicadero para que se tome un descanso.

Indicador de la presión de los neumáticos (TPM): Un monitor de presión de neumáticos avisa al conductor, mediante un piloto de aviso instalado en el salpicadero, si existe algún neumático con la presión baja. Este indicador funciona con los sensores de velocidad de las ruedas del ABS.

Control de crucero: Este sistema electrónico permite al conductor fijar una velocidad de circulación sin necesidad de mantener presionado el pedal del acelerador. Si se pulsa de nuevo el botón se recupera automáticamente la velocidad previamente seleccionada y con solo presionar el pedal del freno se desactiva. La segunda generación de este sistema también incluye el control de la distancia con respecto al vehículo que circula delante (ver ACC).

Sistema de navegación: Es uno de los sistemas de asistencia al conductor más conocidos. Gracias al uso de mapas almacenados y la navegación GPS el sistema calcula la ruta más rápida al destino elegido.

Asistente al aparcamiento: Este sistema ayuda al conductor durante las maniobras de aparcamiento y al mismo tiempo permite reducir el número de facturas para reparar daños en la carrocería. Los hay que encuentran el hueco para aparcar, los que te facilitan el aparcamiento con cámaras que muestran lo que hay alrededor del coche, e incluso los que mueven el volante y el conductor sólo acciona los pedales y el cambio.

Asistente de luces largas adaptativas: Ajusta la iluminación del coche en función de la distancia a la que se encuentre el vehículo que circule por el carril contrario. Según se acerque el vehículo el rango de iluminación va decreciendo evitando así que el conductor tenga que cambiar de luces largas a cortas.

Sistema de iluminación adaptativa (AFL): Este sistema combina una luz giratoria en curvas con otra luz estática que ilumina la carretera en cruces y curvas cerradas. De esta manera se consigue una mejor iluminación según las necesidades del conductor. También existe en el mercado una versión avanzada denominada AFL+ que utiliza los faros bi-xenon y se combina con las luces de iluminación diurna de Led.

Reconocimiento de voz: En la actualidad se ofrecen sistemas de conectividad en el automóvil que reconocen un número determinado de vocablos que permiten al conductor dar órdenes por voz de llamadas de teléfonos, mensajes de texto, regular el climatizador, etc. Los sistemas de reconocimiento de voz tienen como objetivo evitar al máximo las distracciones de conductor.

Asistente al arranque en pendiente (Hill Holder): Detecta el ángulo de inclinación de la carrocería y evita que el vehículo se vaya hacia atrás en una pendiente durante unos segundos cuando el conductor levanta el pie del freno. Este sistema es una función más del control de estabilidad.

Sistema de apertura y arranque sin llave: Permiten la apertura, arranque del motor y cierre del vehículo sin necesidad de sacar la llave del bolsillo o del bolso. Los sensores alrededor del coche detectan la presencia de la ‘llave pasiva’ y activan el mecanismo de cierre. Una vez dentro del coche, arrancar el motor consiste simplemente en presionar el Botón de Arranque mientras se presiona el embrague o el freno en caso de un modelo con caja de cambios automática.

Suspensión Dinámica Adaptativa: Gracias a este sistema la fuerza de amortiguación de las cuatro ruedas se controla de forma inteligente en función del estado de la carretera y al estilo de conducción. No sólo mejora el confort de conducción, sino que también aumenta la estabilidad y maniobrabilidad.